A LOS PIES DEL PARQUE NACIONAL, EL PUEBLO DE RÍO LIMPIO COMBINA LAS ESTAMPAS DEL CAMPO DOMINICANO CON LOS MEJORES SERVICIOS DE LOS GRANDES DESTINOS
Texto y fotos ©Yaniris López
RIO LIMPIO, Elías Piña.- Dicen que los sapos no tienen nalgas, pero este sí. Se yergue a 1,900 metros sobre el nivel del mar llenando de verde el extremo occidental de la cordillera Central y vigilando desde lo alto las viviendas del distrito municipal más pobre del país. El dato llega cargado de una gran paradoja. En el Parque Nacional Nalga de Maco nacen los ríos más importantes de la Línea Noroeste y en sus fértiles tierras crece todo lo que se siembra, desde café orgánico hasta auyamas, desde pinos hasta brillantes trinitarias.
En sus faldas descansa al sol Río Limpio, un poblado de incomparable belleza que nació como colonia agrícola en los años 30 del siglo pasado y que hoy quiere compartir con el mundo los tesoros que ya no puede esconder.
Los atractivos del lugar son tantos que cuesta creer que efectivamente se trate de una de las comunidades más pobres de República Dominicana. Pero es lo que dicen las estadísticas. Se llama Río Limpio en honor al río El Valle, el más cercano al pueblo de los muchos que hay en la zona. Este río siempre luce resplandeciente porque cuando crece se limpia muy rápido. Antes, al lugar se le conocía con el nombre de Mañanguí o Caña Sucia.
Hay opciones para elegir: algunas extremas, como subir a pie hasta la cima del pico y observar selenodontes y el único bosque enano de la isla; otras relajantes, como tomar un baño en las frías aguas del río Artibonito; y románticas, como sentarse a tomar café en una terraza mientras los ojos siguen las líneas perfectas de las laderas en las montañas.
Turismo rural
El distrito municipal Río Limpio, a 800 metros sobre el nivel del mar, pertenece al municipio Pedro Santana y está ubicado al noreste de la provincia Elías Piña. En el pueblo viven aproximadamente 3,800 personas que hubieran preferido, por su cercanía, pertenecer a Dajabón. Una carretera –en pésimo estado- conduce a sus tierras. La ruta más corta desde Santo Domingo es hacer los 36 kilómetros que unen la comunidad con Loma de Cabrera, el casco urbano más cercano.
Ese aparente aislamiento es lo que hace de Río Limpio una de las opciones ecoturísticas más cotizadas del país, pero sólo el que se atreve a llegar sabrá que no se trata de dinero. Un conjunto de detalles lo hace un pueblo especial que merece más de una visita.
Las estampas rurales se suceden una tras otra: calles empinadas y casitas incrustadas en laderas que por trozos le dan la apariencia de una aldea medieval, señoras que llevan mudas de leñas en la cabeza, campesinos tostando café en la azotea de la casa que apenas roza la cabeza del transeúnte, chicas a caballo, olor a café (orgánico, mucho mejor), a tierra húmeda en las mañanas, a chivo liniero al acercarse el mediodía.
Lo mejor para los visitantes - no para los residentes- es que no hay señal telefónica, aunque un centro tecnológico –que ningún viajero osará utilizar salvo para enviar mensajes de condolencias a los que se queden en la ciudad- conecta al pueblo con el mundo. En Río Limpio funciona desde hace 30 años el Centro Regional de Estudios de Alternativas Rurales (Crear), un centro de estudios pionero en el país que capacita estudiantes en agroecología.
Continuación
Ecoturismo en Nalga de Maco (2)
3 comentarios:
Me encanta tu narrativa.
Niña, sólo he llegado hasta Loma de Cabrera...Para la próxima haré el esfuerzo. Te lo prometo....
Indiscutiblemente con lo que escribes de la ruta ecoturistica hasta el menos aventurero se aventuraría a hacer el recorrido...
Saludos
No conocía de este lugar Yalo. Gracias por ilustrarme.
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