Si le gusta
marotear mangos, dese una vuelta por la plaza Pellerano Castro y el parque Julia
de Burgos, en la Ciudad Colonial, baje los escalones que dan al parqueo/basurero
que funciona en los alrededores de la Comandancia
del Puerto de Santo Domingo/Armada Dominicana, entre la Dirección Nacional de Pesca y la Dirección Nacional de Patrimonio
Cultural Subacuático, y disfrute de la temporada.
Las decenas de matas que crecen en el lugar, que de por sí parece un monte, han
parido este año mangos por pipá.
Algunos puede marotearlos desde arriba, desde la barandilla con
pilotillos que le dan a la plaza y al parque (dos en uno) su particular
atracción, incluso luego de que los pintaran con esa horrorosa combinación de
rosado con mamey.
Es más, ni siquiera tiene que marotearlos: el suelo está lleno, lleno de mangos.
Este fin de semana, algunos de los que asistieron a la Feria del Libro no resistieron
la tentación. ¿Por qué va a resistirla usted? Peor es que se pierdan...
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