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30/6/15

“Mami, súbete el zíper” (Novela de una chica ilusa, cap. 16)

Hombres. Muchos lo hacen porque saben que una correrá a subirlo, oh vergüenza, y eso les provoca placer. Otros lo usan como ardid para que una los mire, para llamar la atención. Porque se saben ignorados y despreciables y solo de esta forma una mujer posaría en ellos los ojos cuando te dicen, al pasar: “Mami, súbete el zíper”.
Con voz libidinosa, obscena, empalagosa...
Exactamente como me lo voceó un guachi hace rato, en La 27, en plena calle, a unos diez metros de Caribe Tours, con su fusil descansando en el hombro derecho.
Yo lo miré momentáneamente porque ese es el trabajo del infame reflejo. Y vi en sus ojos de lagarto la malicia que acompañó a la frase, su morbosa insinuación. 
Le corté los ojos a sabiendas de que quería burlarse de mí, una mirada breve de vete a la mierda, imbécil; dedícate a vigilar, vago sin oficio; idiota, depravado hijo de...
En medio del insulto mental decidí que no le iba a dar el gusto de que me viera bajar los ojos y subir la mano, rata de alcantarilla, engendro de mente retorcida, degenerado, ¡estúpido! $%&#@&©!
Apresuré el paso y seguí como si nada. Ya en los escalones de la parada llena de gente (día de pago) le hice honor a la naturaleza humana: coloqué discretamente la pañoleta entre la barriga y la pelvis y miré hacia abajo solo para confirmar que, efectivamente, el zíper estaba abierto. De par en par.

2 comentarios:

Jose - Agente Especial Ret dijo...

jajajajajaja !!

Anónimo dijo...

Suerte que tu insulto fue mental, demostrando si una prudente aptitud que no va con tu actitud prejuiciada. Quizas ese vigilante te quiso cuidar como si tu fueras una de sus hijas o familiar...